Por Luis Bastus
Rosario: La liebre largó con toda furia
Según un relevamiento de precios sobre bienes y servicios en Rosario, una familia de clase media necesitó 42.000 pesos para vivir el mes pasado; 45% más que un año atrás. Impuestos, servicios, carne y limpieza, los rubros más encarecidos
Una familia tipo, de sectores medios, en Rosario, necesitó casi 42.000 pesos para vivir durante el mes de enero, 1.000 pesos más que en diciembre. El número indica que el costo de vida en la ciudad aumentó 2,36% en el primer mes de 2019, a pesar de que es el de menor actividad en comparación con el resto del año. En perspectiva interanual, vivir en Rosario es 45% más caro que en enero de 2018. Los rubros que más contribuyeron al alza general de la canasta son algunos impuestos y servicios, carnes y productos de limpieza.
Son las conclusiones del relevamiento mensual sobre evolución de precios que todos los meses elabora el Centro de Educación, Servicios y Asesoramiento al Consumidor (Cesyac). El trabajo se basa en el sondeo de 40 comercios y empresas radicadas en Rosario, para relevar la evolución de precios de una canasta compuesta por 50 productos de consumo familiar y 19 servicios.
La carne aumentó 12,50%; detalle no menor si ese alimento cubre el 22,3% de la dieta de los rosarinos.
El informe concluyó en que una familia integrada por una pareja y dos hijos que asisten a colegio privado, que alquila vivienda, posee un auto y un abono de medicina prepaga, y que es socia de un club necesitó en enero $41.969,86, es decir, 2,36% más que en diciembre, donde la canasta había costado $41.003.
"Arrancamos un año que ya nos indica lo difícil que será en materia de consumo, tarifas, alimentos e inflación. No podemos adelantar proyecciones teniendo sólo enero como dato, pero más de un 2% en el primer mes del año ya es preocupante, y más cuando los incrementos vinieron tanto por el lado de los alimentos, como comestibles y carnes, como por el lado de los servicios, principalmente en aquellos básicos domiciliarios como agua y luz", analizó el director ejecutivo del Cesyac, Juan Marcos Aviano.
Del costo global, los servicios básicos acaparan el 71% ($29.932), y los productos de consumo masivo se llevan el 29% restante ($12.038).
La mayor influencia, impuestos y servicios: Inmobiliario 27,8%; TGI 30%; Aguas 28%; EPE 16,29%; Aguas 28%.
En el desglose de costos, hay ítems que aumentaron de manera ostensible. Los precios de las carnes subieron, en promedio, 12,50%, y los productos de limpieza, 9,61%. No es un mero detalle si el 22,3% de la dieta de los rosarinos, en promedio, es carne.
Los incrementos más fuertes, según Cesyac, se dieron en las cuentas que llegan a fin de mes. Hubo variaciones tales como Impuesto Inmobiliario (27,8%), TGI (30%), telefonía móvil (Personal) 17%, EPE (16,29%), Aguas (28%), y transporte de pasajeros, 8,92%.
Vale mirar de golpe el dinero que esa familia gastó en algunos productos: $3.787 en carne; $1390 en frutas y verduras; $1.535 en bebidas; un alquiler promediado de 8.859 pesos; y 5.735 pesos en transporte (combustible, colectivos y taxis).
En el Cesyac esperan que el Indec difunda en las próximas horas su índice de inflación. Pero mientras tanto, reparan en la caída del 8 puntos que registró el Indice de Confianza del Consumidor (ICC) elaborado por la Universidad Torcuato Di Tella respecto de diciembre, y 26,7% de descenso interanual. Esta variable refiere a la expectativa que guarda la población respecto de la situación económica, a nivel macro y a nivel personal.
(*) Fuente: Página 12
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