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La profunda huella que deja la pandemia en la pymes

*(Por Raúl Hutin / Opiniones Pymes )El escenario gris para nuestro sector comenzó en 2017 cuando el gobierno de Macri inició una amplia escalada para liquidar a los sectores que denominan no competitivos, lo que desató un efecto domino que terminó con la desaparición de 25.000 empresas y 230.000 puestos de trabajo. Además quintuplicaron el valor del dólar, subieron 3,700% las tarifas, aumentaron la deuda en dólares a valores astronómicos, bajaron el salario real a valores mínimos en la región y produjeron la caída industrial más grande de la historia.**

A poco de andar el nuevo Gobierno nacional y popular se desató la pandemia con sus secuelas de muerte, internaciones, temor e incertidumbre. Se debió implementar medidas de emergencia en todos los campos. Desde construir hospitales, fabricar respiradores, dotar a la sociedad de equipos de protección de la salud a través de barbijos, camisolines o mamelucos, hasta armar camas de terapia intensiva con la tecnología necesaria, incluido el oxígeno que paso a ser un bien escaso.

En ese marco dieron su presente las PYMES, dobladas pero no quebradas, saliendo a cubrir las necesidades básicas del pueblo, a poner sobre la mesa lo que hay que poner para superar, al menos en parte, este momento ten dramático para los argentinos y el mundo. Pero también dio su presente el Gobierno Nacional, implementando con premura herramientas de ayuda para los sectores vulnerables: ATP, IFE, Tarjeta alimentar, bonos extraordinarios, créditos a tasa cero, etc.

Estamos haciendo un esfuerzo enorme y digno de destacar. Lamentablemente aún falta. La batalla continúa y no podemos lamentar más muertos, no podemos desatender la pobreza y la marginalidad, no podemos seguir engrosando las filas de desocupados o sub-ocupados. Para revertir estos flagelos se debe tomar medidas, ya no paliativas, sino más de fondo. Cuando se tomó el compromiso que el salario supere a la inflación, también correlativamente se tomó el compromiso de que los aumentos nominales no se los lleven siempre los mismos, que los controles sobre los aumentos indiscriminados sean efectivos y severos.

Cuando se tomó el compromiso que el salario supere a la inflación, también correlativamente se tomó el compromiso de que los aumentos nominales no se los lleven siempre los mismos, que los controles sobre los aumentos indiscriminados sean efectivos y severos.

La reactivación para lograr la recuperación económica y la inclusión social no puede estar basada solo en un impulso exportador, cuya significación resulta fundamental para para la generación de un vital ingreso de divisas,pero sus efectos multiplicadores en el empleo y el conjunto de la actividad económica son relativamente menores.

"De tal forma, siendo que el consumo interno motoriza el 75% de la actividad económica del país, y que éste requiere que su dinamismo esté impulsado esencialmente por la capacidad de compra de la población, el objetivo debe ser que el mercado interno se revitalice y esto se logra poniendo plata en el bolsillo de la gente"

Raúl Hutin

De tal forma, siendo que el consumo interno motoriza el 75% de la actividad económica del país, y que éste requiere que su dinamismo esté impulsado esencialmente por la capacidad de compra de la población, el objetivo debe ser que el mercado interno se revitalice y esto se logra poniendo plata en el bolsillo de la gente, haciendo que los jubilados cobren una cifra decorosa, que los obreros estén sobre la línea de la pobreza, que los empleados públicos tengan un ingreso digno. A partir de ahí las empresas comenzarán a atender dicho mercado y necesitaran más personal y se pondrá en marcha el circulo virtuoso de la economía.

No están dadas las condiciones de fijarnos en este momento, en plena guerra contra un enemigo voraz pero invisible, en el equilibrio macro-económico o en el fiscal, tampoco pensar en las condiciones en que se puede pagar la deuda externa, tanto con el Club de Paris como con el FMI, sino que la prioridad es atender la deuda moral con los argentinos, atender la salud, la educación, la mesa de todos los días. Un país con un 50% de pobreza e indigencia no es viable así nos hagan creer que a algunos sectores les está yendo excelente y batimos las exportaciones de maíz.

Sigamos vacunando como lo venimos haciendo, sigamos cuidándonos y respetando los protocolos, sigamos poniendo la presencia del estado para que ninguna PYME se caiga. Ayudemos entre todos a mantener el barco a flote, porque si se hunde nos ahogamos todos, aquellos que se creen intocables y los que viajan en tercera. Entre todos, con unidad y solidaridad lo tenemos que llevar a puerto seguro eligiendo el mejor rumbo.

(*) Raúl Hutin, Empresario y Dirigente PYME

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