Daniela Bambill

La oposición en el fondo del pozo

(Por Daniela Bambill) La salida de Caputo del Banco Central marca un antes y un después para la oposición.

Ya no hay “gobernabilidad” que pueda utilizarse como excusa para poner el culo en la banca o apretar el “verde” en el semáforo de las tropelías del oficialismo.

El paro general marcó el termómetro social mientras el Presidente danzaba con los lobos en Nueva York, dos Argentinas pujan por salir a la luz como sino tragicómico de su historia.

En el Palacio Gris la rosca rancia y anacrónica, de espaldas a la calle ruidosa y combativa, parece no encontrar el punto de la terraja para su constitución.

Desde el acuerdo del Senado para el nombramiento del nuevo presidente del BCRA puesto obscenamente por el FMI hasta la aprobación o no del presupuesto en Diputados debieran marcar la agenda legislativa que hasta hace unos días nada mas debatía la educación sexual como chupetín de brea que regala el oficialismo para justificar el trabajo en Diputados….

La oposición genuflexa tocó fondo en el Parlamento, no más chupetines de brea, no más mensajes mediáticos contradictorios con el botón de aprobación sin condicionamientos a un Gobierno pestilente… Si algo aprendemos los peronistas es que se acompaña hasta la puerta del cementerio y este gobierno ya huele a muerto….

La recorrida de técnicos por los medios explicando detalles de las movidas económicas erráticas con dolo evidente del gobierno no parece dar respuesta alguna más que el análisis de lo ya hecho y pronósticos variados según la escuela del economista en cuestión. Esta aparente preocupación por los hechos que indican que Argentina cae indefectiblemente en manos del verdugo solo deja en evidencia la verdad revelada históricamente: La respuesta a un problema POLÍTICO debe ser POLÍTICA.

La trampa en la que sistemáticamente se cae es pensar que la economía y las finanzas son el problema a solucionar, y es allí donde el Parlamento investido de todo el Poder Constitucional para buscar el remedio a los males se baña de indulgencia plenaria para mirar para el costado y no cumplir con los mandatos constitucionales.

Argentina tocó fondo una vez más, no hay cuaderno ni amenaza “bonadiezca” que justifique la inacción política, el Movimiento Obrero ha demostrado que la Unidad es posible más allá de las contradicciones secundarias, cuando el hambre se sienta a la mesa familiar argentina, la dilación de la acción política es cómplice de lo que suceda.

Es tiempo de juntar barro y bosta, es tiempo que en el Palacio gris la rosca pase a segundo plano y las cartas se jueguen acorde a la representación constitucional adquirida, la oposición tiene amplia mayoría si solo se mira el color de las bancas, es tiempo de combinar ese color con la acción concreta.

No hay más excusas, el opositor que acompañe es cómplice del saqueo y en una nueva vuelta a la ruleta democrática no necesitaremos Bonadios para que la Justicia, hoy desnuda y sin venda en los ojos, vuelva a funcionar en favor de la República.

Cuando esto suceda, porque indefectiblemente sucederá no habrá acuerdo político válido para no sentar en el banquillo de los acusados junto a este gabinete inepto y corrupto a los impolutos habitantes del Palacio gris que hayan apretado el botón verde del ultimo semáforo antes del abismo.

(*) Fuente: Instituto Independencia

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